Exposición en Pasaje Villasís
.Queremos que Sevilla siga siendo Sevilla, pero eso, aunque parezca contradictorio, no es posible simplemente quedándonos como estamos. Sólo conservaremos Sevilla si nos ponemos decididamente a vivificar la ciudad. Alguien puede preferir una acumulación de contenedores a unas farolas y unos bancos en la Plaza del Pan, alguien puede preferir ir en coche por la puerta de la catedral hasta la puerta de su cafetería favorita antes que una avenida peatonal, alguien puede preocuparse de unos parterres antes que por una biblioteca de nivel mundial, es posible, pero no es nuestro modelo. No hay disyuntiva entre conservar e innovar: sólo se conserva lo que se innova. El otro modelo, el de una Sevilla vetusta, como de postal descolorida, no la queremos los sevillanos. Amamos a nuestra ciudad y la queremos viva, y por eso la vivificamos. Y no es retórica. Sevilla revive en la Plaza Nueva como en Nervión, revive en la Encarnación como en El Prado, revive en la Avenida como en La Alameda, revive en la Alfalfa y en el Salvador como en los barrios, y en todo ello la arquitectura y los arquitectos están teniendo un papel de importancia, si bien el protagonismo es de la ciudad y de su ciudadanía. Que ha optado, con decisión y con valentía, por activar y renovar la ciudad. Una Sevilla estancada o decadente no es nuestra Sevilla, aunque a algunos le atraiga la estética decadentista.
Otros llevan haciendo lo que nosotros estamos haciendo ahora desde hace mucho tiempo y lo siguen haciendo, como vemos en la exposición «In-vitro»,inaugurada el pasado 4 de octubre, dentro de la V Semana de la Arquitectura,estará abierta durante un mes en el Pasaje Villasís (C/Martín Villa) -desde las 10:00 a las 20:00 horas- hasta su clausura el 4 de noviembre. La muestra recoge una selección de 20 edificios de arquitectura contemporánea proyectados en el entorno de diversas ciudades históricas, que además fueron el resultado de concursos internacionales.
Fotos:http://www.trazegnies.arrakis.es/parasol.html